El ferry italiano, que se incendió hace cinco días frente a la isla griega de Corfú, debe ser remolcado el martes hacia un puerto griego para facilitar la búsqueda de los diez desaparecidos, pero la esperanza de encontrar sobrevivientes disminuye, según las autoridades.
AFP
Un espeso humo sigue saliendo del Euroferry «Olympia» de la compañía italiana Grimaldi, el cual se incendió el viernes por razones indeterminadas hasta el momento, a diez millas náuticas al norte de Corfú, en el mar Jónico.
El balance actual es de un muerto, tres heridos y diez desaparecidos.
El ferry, que conectaba el puerto griego de Igoumenitsa (noroeste) con el italiano de Brindisi, debe ser remolcado hacia «un puerto seguro», a Astakos (a 230km en el sur de Corfú) «para continuar las operaciones con un máximo de seguridad», explicaron los guardacostas griegos en un comunicado.
«Las posibilidades de búsqueda y salvamento a bordo del buque Euroferry «Olympia» se han agotado», añadieron.
«Cuatro remolcadores, dos patrulleros de la policía portuaria y un buque de bomberos participan en la búsqueda», indicó un responsable de la oficina de prensa de la policía portuaria.
Entre los 281 sobrevivientes -230 pasajeros, muchos de los cuales son camioneros de países de Europa del este y 51 tripulantes- se encuentran dos migrantes afganos que no estaban registrados, lo que hace temer que otras personas pudieran haber embarcado sin figurar en la lista de pasajeros.
Tres camioneros heridos permanecen hospitalizados el martes en Corfú: un bielorruso rescatado vivo por los socorristas el domingo y que padece problemas respiratorios, así como un búlgaro y un rumano, según una fuente hospitalaria.
