Las autoridades europeas desmantelaron la infraestructura de una red criminal de fraude con inversiones en línea que engañó a más de 30.000 personas en al menos 71 países y con al menos 20 millones de euros, según estimó este jueves la agencia de coordinación judicial Eurojust.
EFE
El operativo europeo, coordinado por las agencias Eurojust y Europol desde La Haya, englobó a Estonia, Finlandia, Países Bajos, Letonia, Francia, Alemania y Ucrania, cuyas autoridades lograron incautar más de 50 servidores en seis países diferentes, una infraestructura de centros de llamadas que las autoridades lograron desmantelar.
Los criminales contactaron con las víctimas por teléfono o por internet, y se presentaron como agentes de plataformas de comercio en línea de criptomonedas, aunque no se limitaron a las ofertas fraudulentas, sino también instalaron programas de acceso remoto que les permitieron acceder ilegalmente a los ordenadores de las víctimas y robar sus credenciales bancarias.
Eurojust calcula que más de 30.000 personas de al menos 71 países diferentes (al menos 522 víctimas están registradas solo en Estonia) han sido defraudadas por la red criminal, que usaba una infraestructura a gran escala con decenas de servidores virtuales.
Los miembros de la organización usaban ordenadores en centros de llamadas para conectarse a los servidores y tenían acceso a bases de datos sofisticadas y de desarrollo propio, que incluían la huella digital general de las víctimas.