Un atroz homicidio conmovió a la capital carabobeña el pasado viernes, cuando el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) localizó el cuerpo de la doctora Nardy Carolina Mora Rumbo, de 46 años de edad, en las instalaciones de la Unidad Educativa Doctor Rafael Guerra Méndez, al sur de Valencia.
La profesional de la salud, desapareció el pasado miércoles, 24 de agosto. Ese día acudió a trabajar y no regresó a casa. Su madre señala, que ese día salió de su hogar a las 9 de la mañana y, recuerda que la despidió. “Ella me dijo: ‘mamá me voy’, regreso al mediodía. Yo le respondí: ‘Vaya con Dios, hija’, pero no volvió”.
Mora Rumbo se graduó de enfermera y luego de médico integral. Trabajó como enfermera en el Ipasme durante 20 años, prestó sus servicios en el Centro Diagnóstico Integral (CDI) El Palotal y fue trasladada al CDI Carmen Norte en Valencia, una vez que se graduó de médico. Luego, la directora de este CDI la refirió al consultorio ubicado dentro del liceo Rafael Guerra Méndez, donde laboraba desde hace dos meses.
La profesional de la salud fue presuntamente ultrajada y posteriormente descuartizada por uno de los vigilantes, identificado como Yonnata Figueroa, quien fue contratado como encargado de cuidar una cochinera, situada en las instalaciones del plantel educativo. El mismo, fue detenido el día viernes 26 de agosto, luego de haber confesado el homicidio de la médico.
Se conoció que el custodio tenía antecedentes penales por posesión ilícita de sustancias estupefacientes y psicotrópicas (2003) y, también por robo agravado y violencia sexual contra un menor de edad (2013).
La búsqueda continuaba
Luego de hallar una parte del cuerpo de la médico Nardy Mora, el pasado viernes, autoridades continuaron la búsqueda y, en horas de la tarde del sábado 27 de agosto, oficiales de la brigada canina K9 y Bomberos de Protección Civil, localizaron otra parte del cuerpo en aguas del río Cabriales.
Sin embargo, familiares y allegados señalaron que el cadáver no ha sido entregado a sus familiares para darle cristiana sepultura.
Familiares y conocidos protestan
Este lunes, 29 de agosto, familiares y conocidos de la médico, se concentraron en los Tribunales de Valencia exigiendo justicia por el asesinato.
La progenitora de la profesional, pidió una explicación por parte de las autoridades, “¿Cómo ese hombre estaba suelto? ¿Cómo lo metieron en una institución donde hay niños y adolescentes? Queremos que vaya a la cárcel y no lo suelten nunca”, acotó.
La hija de Mora, también asistió a la protesta. “Me dejaron sin mi mamá, apenas soy una niña de 18 años y lo único que pido es justicia. Mi mamá tenía planes conmigo, porque quiero estudiar medicina. Espero que ahora el Gobierno me respalde, porque me quedé sin mi apoyo”, indicó.
Ministerio Público privó de libertad al asesino de la médico
Tras las protestas y vigilias por parte de familiares y conocidos de la doctora Nardy Mora, la noche de este lunes, recibieron respuestas por parte del Fiscal General de Venezuela, Tarek William Saab, quien señaló que Yonnata Figueroa quedó privado de libertad por el asesinato de la profesional de la salud.
En este sentido, Saab afirmó que el sujeto poseía antecedentes penales. También manifestó que el Ministerio Público seguirá adelante su firme lucha en defensa de la mujer.
Cicpc esclareció el caso
El director nacional del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Douglas Rico, esclareció el crimen de la médico Nardy Mora, según informó a través de su cuenta de Instagram.
Rico, detalló que el autor del crimen, identificado como Yonnata Yoel Figueroa Goitia, de 45 años de edad, tomó a la fuerza a la profesional de la salud y se la llevó a un cuarto, donde la golpeó con una mandarria.
Posteriormente, la desmembró con un machete, incineró parte de los restos y otras fueron arrojadas a un cochino y al río Cabriales, de acuerdo al reporte del funcionario.
Se conoció que una cámara de seguridad de un local cercano captó el momento cuando fue abordada por un individuo que la condujo hasta el interior del plantel.
“Este hombre trabaja como vigilante (cercano a la zona)”, precisó Rico, este 30 de agosto, al referirse al presunto homicida.
Una persona con una calidad humana indescriptible
El presidente de la Fundación Dejando Sonrisas, Jesús Díaz, describió a Nardy como una persona inigualable y con una calidad humana indescriptible.
La profesional de la salud, formaba parte de la fundación, donde coordinaba a todo el equipo que laboraba en ella. Asimismo, participó en jornadas de salud, donde ayudaba a quienes más lo necesitaban. «Siempre estaba dispuesta a colaborar», manifestó Díaz.
“Mi hija era una mujer ejemplar, intachable, inteligente, trabajadora y estudiosa. Ayudaba al prójimo. Ella no merecía morir así, en manos de ese monstruo, quiero que se haga justicia”, señaló la madre de la víctima.