El papa instó hoy a que cesen de inmediato los ataques armados en Ucrania, a que prevalezca el diálogo y a que se vuelva a respetar el derecho internacional en ese país tras la invasión rusa lanzada hace once días, al tiempo que pidió que se garanticen los corredores humanitarios.
Con información de DW
Lo que sucede en Ucrania “no es una operación militar, sino una guerra”, que “siembra muerte y destrucción”, dijo Francisco ante al término del rezo dominical del Angelus ante cientos de personas reunidas en la plaza de San Pedro con banderas ucranianas.
El pontífice aseguró además que la Santa Sede está «dispuesta a hacer de todo» por la paz y reveló que dos cardenales han viajado en los últimos días a Ucrania para llevar ayuda, además de agradecer la labor de los periodistas sobre el terreno cuyo trabajo permite «valorar la crueldad de la guerra».
El papa quiso lanzar un llamamiento por el fin de la guerra en Ucrania, un país por el que corren «ríos de sangre y lágrimas», mientras «las víctimas son siempre más numerosas, así como los que huyen, especialmente madres y niños» y «crece dramaticamente de hora en hora la necesidad de asistencia humanitaria».