Los servicios de salud sexual y reproductiva en Latinoamérica y el Caribe retrocedieron unos 30 años a causa de la pandemia del coronavirus, dijo en entrevista con Efe el director regional del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa), Harold Robinson.
Con información de La Patilla
Robinson puso como ejemplo el acceso de las mujeres a los anticonceptivos, cuyo retroceso se ubicó en 2021 “más o menos” a los niveles de 1990.
“Si uno aplica eso a todas las áreas eso es un retroceso de más o menos 30 años”, señaló en la entrevista.
La situación se debió a que muchos países limitaron estos servicios en medio de la pandemia, mientras que organismos que trabajan a favor de los derechos de las mujeres se vieron obligados a mover los recursos a otras aéreas de la salud.
A causa de esto, los servicios de salud sexuales y reproductivos tuvieron un impacto “muy fuerte”, reconoció Robinson.
Esto contribuyó a un aumento de embarazos no deseados, miles de ellos precoces.
Según datos ofrecidos por Unfpa, el año pasado casi 12 millones de mujeres de 115 países perdieron el acceso a los servicios de planificación familiar, lo que originó 1,4 millones de embarazos no planeados.
Robinson Davis también se refirió al embarazo en adolescentes en América Latina, la segunda región con la mayor cantidad de embarazos tempranos.
Este es un tema “más profundo” que requiere de una política integral para afrontarlo, y puso de ejemplo países como Uruguay donde las políticas de educación sexual han ayudado a bajar los embarazos de adolescentes.
Datos de la ONU indican que en América Latina y el Caribe se producen 62 nacimientos por casa 1.000 niñas adolescentes de entre 15 y 19 años.