Los ocho migrantes, en su mayoría venezolanos, que fallecieron este domingo 7 de mayo tras ser atropellados por un vehículo a las afueras de un refugio en Brownsville, Texas, Estados Unidos, solo esperaban el boleto para viajar a su destino final, incluso algunos ya lo tenían.
Por El Pitazo
Así lo confirmó a El Pitazo el personal del refugio Centro Obispo Enrique San Pedro Ozanam, dedicado a la atención a migrantes y personas sin hogar. Hasta el momento desconocen la identidad de los migrantes y del atacante, quien fue detenido minutos después del hecho.
«El refugio es un welcoming center (centro de acogida). Allí les orientan, le preguntan quién los va a esperar, si la persona que los espera le puede pagar el boleto aéreo o por autobús, la persona que los va a recibir hace la transferencia y los representantes del welcoming center arreglan la logística del viaje por avión o por autobús«, explicó por su parte Patricia Andrade, directora de Raíces Venezuela Miami, una ONG que apoya a los migrantes en esa ciudad de Estados Unidos.
Venezolanos fallecidos se encontraban en una parada
En la mañana de este domingo 7 de mayo unos 20 a 25 migrantes permanecían sentados en la acera frente al Centro Obispo Enrique San Pedro Ozanam, en una parada de autobús que no cuenta con bancos ni señalización, cuando fueron arrollados por un sujeto a bordo de una camioneta marca Range Rover.
El vehículo se subió a la acera y avanzó unos 60 metros. Incluso alcanzó a algunas personas que caminaban a unos 10 metros del grupo principal, reseñaron agencias de noticias. Al menos once personas más resultaron heridas.
Según el jefe de la policía local, Martín Sandoval, el atacante fue arrestado y fichado con el cargo de conducción imprudente, luego de que testigos lo retuvieran hasta la llegada de los oficiales. Además, recibió atención médica y le practicaron pruebas para determinar si había consumido alcohol o drogas. El funcionario consideró probable que se agreguen otros cargos, pues sospechan que pudo tratarse de un acto intencional.
