Joko Widodo, presiente de Indonesia, ha lamentado los hechos y ha pedido que se pare la competición de forma temporal. Mientras tanto, se llevará acabo una investigación sobre lo sucedido.
Con información de AS
«Expreso mis profundas condolencias por la muerte de 174 de nuestros hermanos y hermanas en la tragedia del fútbol en Kanjuruhan. También he ordenado a la Menpora, al Jefe de la Policía Nacional y al presidente de la PSSI que realicen una evaluación exhaustiva de la realización de los partidos de fútbol y también de los procedimientos de seguridad para su organización. Específicamente al Jefe de la Policía, le pido que investigue y profundice en este caso. Por ello, ordeno detener temporalmente la liga de fútbol hasta que se lleve a cabo la evaluación y la mejora de los procedimientos de seguridad. Lamento esta tragedia y espero que sea la última tragedia del fútbol en el país. No debe haber más tragedias humanas como ésta en el futuro», fueron sus palabras.
Tres posibles causas de la tragedia
Las autoridades indonesias van a investigar las causas de lo acontecido. Hay tres versiones.
La primera, achaca la tragedia a la actuación de la policía, la cual irrumpió en el césped haciendo uso de porras y gases lacrimógenos. La segunda, a un hacinamiento del estadio. Cabían 38.000 personas y había más de 42.000. La tercera, a deficiencias en la seguridad. Estos errores en el protocolo retrasaron la llegada de las asistencias médicas.
Todo ello está ahora bajo investigación de las autoridades competentes. De momento, el saldo es de 174 muertos y 180 heridos en la que es la tragedia más grave en el mundo del deporte en los últimos 50 años, solo superada por los 384 fallecidos en 1964 en un partido entre Perú y Argentina disputado en Lima.