La medicina lo dijo, sufrir de estrés de forma prolongada puede acelerar el proceso de envejecimiento y afectar la salud de las personas, es por que una de cada cinco personas en España afirma haber tomado medicación para el estrés y la depresión en el último año, de acuerdo a un estudio realizado por Ipsos.
Pero ¿Hay manera de mantenerlo a raya? La psicóloga Anna Coderch, colaboradora del laboratorio PiLeJe especializado en microbiota, micronutrición y fitoterapia, repasa para 20Minutos las claves para combatir sus efectos así como algunos remedios naturales que pueden ayudar a mitigarlo.
¿Estamos demasiado acostumbrados a recurrir a la medicación como primer recurso cuando pasamos por una etapa estresante o se trata de un desconocimiento por nuestra parte de otro tipo de terapias que pueden ayudarnos?
Habitualmente valoramos el estrés como algo incómodo o malo, de lo que necesitamos aliviarnos, en vez de verlo como una respuesta adaptativa a una situación y que requiere, por nuestra parte, algún tipo de atención.
La medicación es un recurso que, en un momento dado, nos puede ayudar a calmarlo, pero tarde o temprano necesitaremos prestar atención a cómo afrontamos nuestra vida y nuestras relaciones, ya que el estrés y la depresión acostumbran a ser respuestas de nuestro organismo que pide a gritos descansar y cuidarse.
¿Cuáles serían tus recomendaciones diarias para intentar minimizar los efectos del estrés y salir de este tipo de situaciones que reducen tanto nuestra calidad de vida?
Algo muy básico como darnos cuenta de que estamos diseñados para el bienestar y la ‘ley del mínimo esfuerzo’, y aunque esto parezca imposible de alcanzar o incluso una ficción, si eres muy honesto, biológicamente tiene sentido. Hay que encontrar el sentido a priorizarte y darte cuenta de que en tu cuerpo ya tienes lo que necesitas para obtener la calma necesaria y conectar con tus propios recursos que son muchos. Por ejemplo, realizar ejercicios de respiración consciente o procurar realizar trayectos cortos a pie, te ayudarán a obtener un equilibrio mental.
Necesitamos tiempo de descanso de calidad, para reponernos y recargar energía. Para ello, cuidemos del tiempo y del lugar donde vamos a dormir, para que sean las horas necesarias, fuera de cualquier distracción. Para tu actividad en algunos momentos a lo largo del día y haz algún estiramiento o respiración consciente e incluso sal a dar un pequeño paseo en el que te toque el aire.
También necesitamos relaciones de calidad. Es importante que elijamos relaciones sanas, que nos aporten espacios de risas, sostén y calidez. Encuentra gente con la que te sientas a gusto. Para ello, date espacios para practicar lo que te gusta para que encuentres personas afines y te resulte más fácil crear vínculos cercanos.