El consumo excesivo de alcohol es perjudicial para la salud. Por ejemplo, la cerveza puede representar riesgos como muerte súbita, cáncer, pancreatitis, enfermedades hepáticas, daños cerebrales, presiona arterial alta, entre otras, según la Fundación Española del Corazón.
“En los Estados Unidos, el consumo excesivo de alcohol ocasionó aproximadamente 140 mil muertes y representó 3.6 millones de años de vida potencial perdidos (AVPP) anualmente, desde el 2015 al 2019, y acortó en un promedio de 26 años la vida de los que fallecieron”, señalan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en un informe.
¿Cuáles son los riesgos de consumir cerveza en lata?
De acuerdo con este centro médico, algunos envases de latas y plásticos están hechos con BPA, que significa bisfenol A. Esta es una sustancia química que se utiliza para almacenar bebidas y alimentos, incluso las botellas de agua.
“Las resinas epoxídicas se utilizan para recubrir el interior de productos metálicos”, indica.
A partir de ahí, el consumo de cerveza en lata debería ser reducido y más bien servirla en vasos de vidrio, puesto que según la entidad la exposición de bisfenol A puede tener efectos negativos sobre el cerebro de los fetos. Incluso precisa que algunos estudios indican que elevaría la presión arterial y las probabilidades de diabetes tipo 2.
No obstante, comenta que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) señala que los niveles bajos de esta sustancia no son nocivos para la salud.
Por otro lado, Radio Fórmula México menciona que otro posible riesgo de consumir cerveza en lata podría elevar el contagio de Escherichia coli. Una bacteria que se transmite al hombre por el consumo de alimentos contaminados, como productos de carne picada cruda o poco cocida, leche cruda, y hortalizas y semillas germinadas crudas, asegura la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los síntomas relevantes de esta infección son diarrea, calambres abdominales, fiebre y vómito. “La mayoría de los pacientes se recuperan en el término de diez días, pero en un pequeño porcentaje de los casos (especialmente niños pequeños y ancianos) la infección puede conducir a una enfermedad potencialmente mortal”, añade la entidad internacional.
Finalmente, la recomendación apunta a un consumo moderado de cerveza en recipientes que se considere que no colocan en riesgo la salud.