Adoptar hábitos saludables no solo nos permite mejorar la calidad de vida, también nos lleva a compartir con los demás aquellos cambios que realizamos por el bien de nuestra salud. Hacer este proceso en compañía de un profesional nos garantizará que estamos siguiendo el camino correcto, sin ponernos en riesgo.
Con información de La Patilla
Una de las principales recomendaciones que siempre escuchamos es sobre el consumo de agua, la cual prevalece sobre las bebidas azucaradas, como gaseosas, jugos envasados, entre otros derivados.
Aquellos que no gustan de su sabor, deben tomar medidas que les permitan adaptarse para ingerirlo, sin que este se convierta en una incomodidad. Sigue tu ritmo y reconoce aquellos momentos en los que verdaderamente necesitas estar hidratado.
Se dice mucho sobre la cantidad de agua que una persona debe tomar al día. En las siguientes líneas explicaremos lo que dicen las instituciones oficiales en Perú para ampliar nuestro panorama de conocimientos.
¿CUÁNTOS LITROS DE AGUA AL DÍA SE DEBE TOMAR?
La Autoridad Nacional del Agua (ANA) precisa que la cantidad de agua por persona varía esencialmente por la edad y el sexo, dando como ejemplo que, los niños entre 3 y 13 años pueden beber unos 2.1 litros diarios, mientras que las niñas, llegan a tomar hasta 1.9 litros.
“El agua es esencial para el ser humano. Se sabe que más de un 70 % de nuestro cuerpo está formado por H2O”.
¿Cuánta agua deben tomar los adultos?
En este caso, la organización indica que también se basa en las características anteriormente indicadas. “Mientras que las mujeres deben tomar alrededor de 2 litros diarios, en el caso de los hombres esta cantidad aumenta hasta los 2,5 litros”.
Cabe resaltar que cuando se hace mención al consumo de agua para mantenerse hidratado, no solo hace referencia a la propiamente dicha, sino a cualquier líquido que la contenga, incluso, se considera a la que forma parte de las comidas.
ANA indica que la recomendación es que un 75% – 80% de líquido provenga de las bebidas y un 20% – 25% de los alimentos.
Se precisa que el cálculo de las cantidades también va de la mano de las actividades que realizamos, por ejemplo, al hacer ejercicio, exponernos a espacios calurosos, entre otros.