miércoles, marzo 19, 2025
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Carpe Diem; por Marbella Díaz Wever

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Marbella Díaz Wever

No hace falta ser gurú para entender que el día hay que aprovecharlo en su máxima expresión. Un nuevo amanecer viene cargado de rayos de sol, de aire, de tardes, de lluvias, de noches, de luna y estrellas.

Todo cuanto nos rodea, no es un caparazón duro, es nuestro techo, casa y hogar, es la inspiración, inhalación y exhalación, es vivir el momento sin expectativas fantásticas acerca del futuro.

CARPE DIEM es una expresión que proviene del latín, una connotación que implica: ¡Hey, vive, aprovecha el tiempo, el mañana es impredecible e incierto!

CARPE DIEM es el grito de: No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy, o Si te dan un limón haz una limonada.

La muerte cohabita con nosotros, un día mas también es uno menos, entonces ¿Qué hacemos con nuestro hoy

El poeta romano Horacio fue el primero en usar esta expresión, él se refería a la cosecha del día, que no es otra cosa que sembrar y obtener el fruto presente.

La frase completa del poeta fue “carpe diem quam mínimum crédula postero”, si la traducimos al español, sería “aprovecha cada día, no te fíes del mañana”.

Vivir el día a día como si fuera el último día es la consigna, que todavía muchos humanos no entienden porque el aquí y el ahora es un estado natural, sin filtros y sin parafernalia.

Quien vive del pasado vive lleno de angustia y quien vive pensando en el futuro vive lleno de ansiedad, de ambos estados se han compuesto melodías, el CARPE DIEM es una invitación a no perderse del momento y del instante sin preocupaciones innecesarias acerca de lo que no ha sucedido.

En la película “La Sociedad de los Poetas Muertos” (1989), un profesor de literatura ruega a sus alumnos continuar el precepto del CARPE DIEM, cambiando la actitud frente a la vida bajo esta premisa.

Cada momento de nuestras vidas genera un aprendizaje pero no podemos adelantarnos al futuro y tampoco retrasarnos al pasado pues sería una inmadurez.

Los individuos somos seres finitos, lo verdaderamente certero es la transitoriedad de la vida y el encuentro con la muerte como final de nuestro paso por este mundo terrenal.

Humanos de esta comarca, el memento morí, nos señala, recuerda que vas a fenecer.

¡Vive!

Marbella Díaz Wever

Licda. Educación/Orientadora

Locutora UCV – Articulista Opinión WTC

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