Copa Airlines tiene previsto aumentar sus vuelos a Venezuela, a medida que la incipiente recuperación económica impulsa la demanda de viajes, y se abrirán nuevas conexiones con Colombia.
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La aerolínea, con sede en Panamá, tiene previsto añadir ocho nuevos vuelos a los 35 semanales ya existentes, según informó el director general de Copa en Venezuela, Roberto Pulido. Estas nuevas frecuencias conectarán la capital y otras tres ciudades con Ciudad de Panamá, dijo, en una entrevista en Caracas.
La mejora de las relaciones entre Venezuela y Colombia también está aumentando las oportunidades para las compañías aéreas. La aerolínea de bajo costo Wingo, subsidiaria de Copa, está lista para reanudar los vuelos entre los dos países una vez que reciba la autorización de sus gobiernos, añadió.
Otras aerolíneas, entre ellas Turkish Airlines e Iberia, también están aumentando sus operaciones en el país, que se recupera de una recesión de siete años.
La economía venezolana creció un 6% el año pasado, el ritmo más rápido desde 2007 según las estimaciones del Fondo Monetario Internacional, gracias a la recuperación del sector petrolero y al alivio de las sanciones impuestas por Estados Unidos.
«Nuestra tasa de ocupación actual supera el 80%», afirmó Pulido. «Eso es muy alto», informó una nota de Reuters.
Las conexiones adicionales, que incluyen una ruta diaria desde Maracaibo, serían un bienvenido respiro para los venezolanos, que han tenido pocas opciones de vuelo en los últimos años. Durante la prolongada recesión, aerolíneas como United Airlines, American Airlines y Delta Air suspendieron sus vuelos al país, dejándolo en gran medida aislado para los viajeros internacionales.
La situación empeoró con las sanciones estadounidenses y la pandemia de Covid-19.
El año pasado, la invasión rusa de Ucrania llevó a Estados Unidos a suavizar sus restricciones al sector petrolero venezolano, mientras que la victoria del izquierdista Gustavo Petro en las elecciones presidenciales de Colombia provocó una espectacular mejora de las relaciones entre Caracas y Bogotá.
El pasado mes de junio, Copa añadió la ciudad venezolana de Barcelona a sus destinos directos desde Panamá. La ruta a esta ciudad oriental cercana a los yacimientos petrolíferos de los estados de Anzoátegui y Monagas es ahora la de mayor crecimiento del país, dijo Pulido citado por Reuters.
El problema de la deuda
Durante años, el gobierno de Venezuela ha mantenido una deuda con Copa, ya que el prolongado control de cambio que imperó en Venezuela impedía a la compañía obtener ingresos por su operación venezolana. Los controles se han abolido desde entonces, y la economía está ahora en gran medida dolarizada.
Aunque la empresa ha mantenido reuniones con funcionarios del gobierno para buscar formas alternativas de pago, no se ha llegado a ninguna solución concreta, dijo Pulido.
«Entendemos que esto es algo que debe resolverse más adelante, pero, hasta ahora, continuamos con nuestras operaciones», dijo.
