Tras comprobar los riesgos de problemas cardíacos y mentales a través de distintos estudios realizados en Europa, el Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia de la Agencia Europea del Medicamento ratificó su recomendación de retirar las autorizaciones de comercialización de los medicamentos de obesidad y anfepramona.
Con información de El Español
Los fármacos antiobesidad con este principio activo no figuran en los países de la UE en los que se comercializan son Alemania, Dinamarca y Rumanía, donde están disponibles para pacientes con un Índice de Masa Corporal de al menos 30, correspondiente a la obesidad. Los nombres comerciales de los productos incluyen el ‘Amfepramon-Hormosan’ 25 mg Weichkapseln, ‘Amfepramon-Hormosan’ 60 mg Retardkapseln y ‘Tenuate Retard’ 75 mg retardtablette.
Sin embargo, también afectan a otro producto popularizado como tratamiento adelgazante, el ‘Regenon’ y ‘Regenon 25 mg cápsula moi’. Eso ha llevado a la existencia de redes de compraventa irregulares, y a consumidores que podrían adquirir estos fármacos de forma online desde países no sujetos a las regulaciones y recomendaciones de la autoridad sanitaria europea.
La anfepramona es un simpaticomimético, lo que significa que actúa en el cerebro y provoca efectos similares a los de la adrenalina. Esto provoca una reducción en la sensación de hambre y facilita la pérdida de peso. En los países en los que está aprobada como tratamiento para pacientes con obesidad, se receta cuando otros métodos para adelgazar no han funcionado.
La decisión de la EMA llega tras una revisión de su propia recomendación realizada en junio de 2022, y que las empresas que comercializan estos medicamentos solicitaron volver a evaluar. Esta primera revisión valoró que las medidas para restringir el uso de estos medicamentos por razones de seguridad no han sido suficientemente efectivas, y que se están usando fuera los márgenes prescritos para su consumo.
Los medicamentos también se han estado usando por parte de pacientes con antecedentes de enfermedades cardíacas o trastornos psiquiátricos.
Esto aumenta el riesgo del agravamiento de problemas médicos de ambos tipos. Además, se han dado casos de uso durante el embarazo, lo que se asocia a riesgos para el feto en gestación.