La anemia es una condición en la que el cuerpo no tiene suficientes glóbulos rojos o hemoglobina, según Mayo Clinic. Los síntomas pueden variar y pueden ser difíciles de reconocer al principio. A medida que avanza, pueden surgir signos como fatiga, mareos, piel pálida y dificultad para respirar, según el Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre de los Estados Unidos.
El tipo más común de anemia es la anemia por deficiencia de hierro. La médula ósea necesita hierro para producir hemoglobina y sin suficiente hierro, no se pueden crear suficientes glóbulos rojos. Consumir alimentos ricos en hierro puede prevenir la anemia.
La fresa es una de las frutas más saludables y versátiles que existen. Contiene antioxidantes, vitaminas C, B2, B3, ácido fólico, fibra y es baja en azúcar. También tiene propiedades diuréticas, antiinflamatorias y depurativas debido a sus flavonoides. Su alto contenido de hierro la hace ideal para prevenir la anemia, y también es importante para la formación de glóbulos rojos y para evitar la anemia perniciosa.
Otros alimentos que ayudan a combatir la anemia son la carne roja, los frijoles negros, el hígado, la naranja, la espinaca y el huevo, según el portal Tua Saúde. Estos alimentos son ricos en hierro, vitamina B12, vitamina C y ácido fólico, nutrientes necesarios para la producción de glóbulos rojos y para prevenir y curar la anemia.
