La mañana de este viernes, como de costumbre, Edgar Javier Pino Vásquez llevó a sus tres pequeños al colegio. Cuando los menores de 7, 10 y 12 años de edad despidieron a su papá en la puerta de una escuela privada de Santa Rosa, Valencia, no se imaginaron que sería la última vez que verían con vida a su padre: minutos después recibiría múltiples disparos en la Av. Michelena de la ciudad, a la altura del puente La Quizanda.
Con información de Notitarde
Pino (42) iba a conduciendo un Toyota Yaris, placa AE894FK. De copiloto estaba su suegra, Graciela Ribera, mientras que el asiento trasero era ocupado Kenia Marife Roa Ribera (39), su esposa. “Nos interceptaron de frente en un carro. Se bajaron dos hombres, se acercaron a nosotros y uno de ellos fue el que apuntó directamente a mi yerno y disparó”, comentó la señora al equipo de Notitarde, intentando asimilar todo lo que había sucedido.
Los primeros en enterarse del presunto sicariato fueron los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), quienes cerraron el paso en la transitada vía y avisaron a la división de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc). Los detectives arribaron a la escena a las 8:45 a.m. para levantar el cadáver, trasladarlo a la morgue de la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera (CHET) e iniciar con las averiguaciones del caso.