Unicef denunció el posible impacto “severo” que puede afectar la alimentación infantil en Oriente Medio y el Norte de África, tras la disrupción de las importaciones y los altos precios de materias primas como el trigo, aceites y combustibles derivados por el conflicto en Ucrania.
Con información de El Diario 2001
El organismo informó su preocupación en un comunicado, donde señaló que mientras «la guerra en Ucrania continúa; millones de niños en Oriente Medio y el Norte de África» afrontan una situación en la que “las familias ya luchan por llevar comida a la mesa durante el mes sagrado de ramadán”.
“Con los conflictos en marcha, la inestabilidad política, la pandemia de covid-19 y la guerra en Ucrania; la región atestigua alzas sin precedentes en los precios de la comida unidos a un bajo poder adquisitivo. El número de niños malnutridos probablemente se incrementará drásticamente”, indicó Adele Khodor, la directora regional de Unicef para Oriente Medio y el Norte de África.
El documento subrayó que más del 90 % de los alimentos que se consumen en la región son importados; con Rusia y Ucrania como los mayores proveedores de granos y aceite que se consumen.
En la región son varios los países que sufren malnutrición infantil debido a conflictos armados y crisis humanitarias. Según Unicef, tan solo el 36 % de todos los niños de la zona tienen la dieta necesaria para un desarrollo saludable.