La memoria se ve fuertemente afectada durante la etapa del envejecimiento, razón por la que los profesionales de la salud insisten de manera frecuente en llevar hábitos buenos a lo largo de la vida, con el fin de evitar riesgos que compliquen la salud del cerebro.
Los médicos aseguran que durante la etapa de la vejez es normal que los pacientes no recuerden ciertos detalles con la misma facilidad; sin embargo, terminan recordándolos, a diferencia de aquellas personas que hagan lo que hagan no recuerdas las cosas. Esto ya se debe a que están padecimiento algún tipo de enfermedad cognitiva que afecta la memoria de manera directa.
Las mejores vitaminas para la memoria
El Español, en su sección de salud y cuidado personal, menciona cuáles son las vitaminas que no pueden faltar dentro de la dieta, ya que promueven la buena salud del cerebro y mantienen en excelentes condiciones la memoria.
Este tipo de nutrientes se pueden consumir mediante la ingesta de alimentos que las contenga o por medio de suplementos o cápsulas; sin embargo, antes de consumirlas por este medio se recomienda contar con la probación de un profesional de la salud.
Vitamina A
- A la vitamina A también se le conoce como retinol y se destaca por los beneficios que le trae a la salud ocular. Este compuesto cuenta con grandes cantidades de antioxidantes (betacarotenos) que frenan la degeneración del tejido ocular; además, es fundamental para el desarrollo y la reparación de las células. Estos son algunos de los alimentos que contienen este compuesto: verduras y hortalizas de hoja verde, la calabaza y el hígado.
Vitamina K
- La función principal de este compuesto es promover y generar la coagulación de la sangre, pese a esto, estudios han revelado que la vitamina K también influye en el comportamiento psicomotor y en la cognición. La yema de huevo, las hortalizas y verduras de hojas verdes, las coles, el germen de trigo o la soja contiene este compuesto.
Vitamina C
- Este nutriente es conocido por su capacidad para fortalecer y aumentar las defensas del sistema inmune; no obstante, influye de manera directa en la producción de los neurotransmisores los cuales son esenciales para la buena salud del cerebro. Entre los alimentos ricos con vitamina C se destacan: las frutas cítricas, las fresas, la piña, la papaya, el pimentón, el brócoli, el kiwi, el tomate, entre otras.
Vitamina E
- Según varias investigaciones, este compuesto es crucial a la hora de prevenir el deterioro cognitivo, ya que mejora la adquisición y retención de datos, así como la defensa oxidativa del hipocampo. También influye de manera directa en el proceso cognitivo de la atención y funciona como antioxidante, protegiendo las células de los radicales libres. El aceite de oliva, las almendras, la manzana, el aguacate o la espinaca son alimentos cargados con este nutriente.
Vitamina D
- La mayor cantidad de esta vitamina se obtiene por medio de la exposición al sol, la idea es tener los cuidados pertinentes para no poner en riesgo la salud de la piel. Varios estudios han relacionado el déficit de esta vitamina con niveles bajos en el estado de ánimo y con el deterioro del rendimiento cognitivo, por eso, se considera como uno de los nutrientes más importantes para promover la buena salud del cerebro. La mayoría de veces por evitar el cáncer de piel o porque se vive en una ciudad de clima frío, los profesionales le recetan a sus pacientes suplentes con vitamina D, para suplir las necesidades. Pese a esto, este compuesto se encuentra en pequeñas cantidades en alimentos como el salmón, los champiñones y algunos cereales.